Letra de Verona
Aprendieron a quererse
Sin palabras y sin besos
Y cambiaron los "te quieros"
Sin palabras y sin besos
Y cambiaron los "te quieros"
Por miradas desde lejos
Y pasaron los inviernos
Prometiéndose amor eterno
Y gritaron en silencio
Cómo arder los incendios
Desnudando una caricia sueñan
Que juntos estarán
Cómo dos extraños que se miran
Y sienten el amor cuando suspiran
Que viven en su propio paraíso
Que saltan por un beso al precipicio
Dueños de la pasión que les domina
Saltan al vacío como suicidas
Pues ya no tienen miedo a la caída
Sangraran de amor eterno sus heridas
Ella sueña que algún día
Pueda compartir almohada
Y por fin se apague el fuego
Que arde todas sus mañanas
Él reprime y luego esconde
Tanto sentimiento vivo
Desespera y pierde el norte
Porque ya su amor prohibido
Desnudando una caricia sueñan
Que juntos estarán
Cómo dos extraños que se miran
Y sienten el amor cuando suspiran
Que viven en su propio paraíso
Que saltan por un beso al precipicio
Dueños de la pasión que les domina
Saltan al vacío como suicidas
Pues ya no tienen miedo a la caída
Sangraran de amor eterno sus heridas
Y pasaron los inviernos
Prometiéndose amor eterno
Y gritaron en silencio
Cómo arder los incendios
Desnudando una caricia sueñan
Que juntos estarán
Cómo dos extraños que se miran
Y sienten el amor cuando suspiran
Que viven en su propio paraíso
Que saltan por un beso al precipicio
Dueños de la pasión que les domina
Saltan al vacío como suicidas
Pues ya no tienen miedo a la caída
Sangraran de amor eterno sus heridas
Ella sueña que algún día
Pueda compartir almohada
Y por fin se apague el fuego
Que arde todas sus mañanas
Él reprime y luego esconde
Tanto sentimiento vivo
Desespera y pierde el norte
Porque ya su amor prohibido
Desnudando una caricia sueñan
Que juntos estarán
Cómo dos extraños que se miran
Y sienten el amor cuando suspiran
Que viven en su propio paraíso
Que saltan por un beso al precipicio
Dueños de la pasión que les domina
Saltan al vacío como suicidas
Pues ya no tienen miedo a la caída
Sangraran de amor eterno sus heridas