Letra de Huellas
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Deja de pensar, el caos ya tiene teoría,
las profecías se han mezclado con la ciencia ficción.
Las vírgenes mestizas de la santería
las profecías se han mezclado con la ciencia ficción.
Las vírgenes mestizas de la santería
contemplan las mil dudas que nos ha dejado el ron.
Y el hombre que pide en la esquina
no encuentra una explicación,
porque sigue unas huellas que nunca le llevan,
sigue unas huellas que nunca le llevan al sol.
Faltan soñadores, no intérpretes de sueños,
artistas del alambre, música de afilador.
A ti te mandan rosas y son de invernadero,
a mí cartas de amor escritas en ordenador.
Y el niño que ahora tiene miedo
no encuentra una explicación,
porque sigue unas huellas que nunca le llevan,
sigue unas huellas que nunca le llevan al sol.
Gente que va, que va de un lado para otro.
Gente que va buscando un poco de emoción.
La multitud crea muchos solitarios
sin una explicación, sin una explicación.
Demos a los cuerdos de su propia medicina:
una parte de locura y tres de confusión.
Mi ángel de la guarda está esnifando cocaína,
ahora se que yo no tengo salvación.
Y el perro que le ladra al día
no encuentra una explicación,
porque sigue unas huellas que nunca le llevan,
sigue unas huellas que nunca le llevan al sol.
Y el hombre que pide en la esquina
no encuentra una explicación,
porque sigue unas huellas que nunca le llevan,
sigue unas huellas que nunca le llevan al sol.
Faltan soñadores, no intérpretes de sueños,
artistas del alambre, música de afilador.
A ti te mandan rosas y son de invernadero,
a mí cartas de amor escritas en ordenador.
Y el niño que ahora tiene miedo
no encuentra una explicación,
porque sigue unas huellas que nunca le llevan,
sigue unas huellas que nunca le llevan al sol.
Gente que va, que va de un lado para otro.
Gente que va buscando un poco de emoción.
La multitud crea muchos solitarios
sin una explicación, sin una explicación.
Demos a los cuerdos de su propia medicina:
una parte de locura y tres de confusión.
Mi ángel de la guarda está esnifando cocaína,
ahora se que yo no tengo salvación.
Y el perro que le ladra al día
no encuentra una explicación,
porque sigue unas huellas que nunca le llevan,
sigue unas huellas que nunca le llevan al sol.
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